Hoy os propongo una receta tradicional, de las de toda la vida. No confundir con las magdalenas o con los sobaos pasiegos aunque algunos ingredientes son compartidos por las tres elaboraciones.
La receta de las abuelas llevaba manteca de cerdo en lugar de mantequilla, pero ya hace tiempo que incluso los obradores que las elaboran en su lugar de origen (Astorga) vienen utilizando la mantequilla por ser más sana que la manteca de cerdo. Si queréis hacer la receta antigüa solo tenéis que sustituir una por otra.
Evidentemente la masa se puede aromatizar con canela, vainilla, ralladura de limón o de naranja, etc... Yo he preferido realizar la receta lo más parecido a la tradicional de toda la vida y no le he puesto ningún aromatizante.
He usado los típicos moldes de magdalenas, aunque para esta elaboración se utilizan moldes rectangulares o cuadrados como los que se utilizan para los sobaos pasiegos.
A cocinar que para luego es tarde.
Dificultad: Fácil. Nivel de suciedad: Casi nada.
Coste: Barato. Tipo receta: Postre.
Grupo alimenticio: Harinas. Tipo cocina: Horno.
Temporada: Todo el año.
Ingredientes
200 gr de harina.
- 200 gr de mantequilla derretida y espumada.
- 200 gr de azúcar.
- 3 claras de huevo.
- 3 yemas de huevo y 1 huevo entero.
- 1 sobre de levadura química o bicarbonato.
- 4 cucharadas más de azúcar (2 para el merengue y 2 para espolvorear las mantecadas).
Elaboración
Precalentar el horno a 180ºC, calor arriba y abajo.
Derretir la mantequilla a fuego muy lento y retirar la espuma.
Echar la mantequilla en un bol, añadir el azúcar y batir hasta integrar totalmente los dos ingredientes.
Añadir las yemas de una en una y por último, añadir el huevo entero.
Seguir batiendo hasta que esté todo perfectamente integrado.
Añadir a continuación poco a poco, la harina tamizada y la levadura. Seguir batiendo hasta integrar.
Montar las claras a punto de nieve con dos cucharadasde azúcar.
Incorporar el merengue a la masa de las mantecadas poco a poco a cucharadas y haciendo movimientos envolventes con la cuchara (no batir).
Verter la masa en los moldes (llenar sólo hasta la mitad), espolvorear un poco de azúcar sobre cada uno y hornear entre 20 - 22 minutos.
